Los videojuegos han demostrado desde tiempos inmemoriales su capacidad como vía de escape de la realidad. Títulos como Final Fantasy VII, The Last of Us, Resident Evil o Animal Crossing tienen en común, no solamente haber alcanzado ventas millonarias, sino además presentar elaboradas historias. No obstante, estos no pueden ser considerados únicamente como una forma de evasión, puesto que tienen el potencial no solo de representar la realidad, sino también de modelarla a través de simulaciones.
Esta poderosa forma de representación se basa en reglas que imitan el comportamiento de los sistemas simulados, y como cualquier representación construida de la realidad, las simulaciones transmiten el sesgo de sus diseñadores. Y aunque en los tiempos que corren tenemos títulos que van más allá de simular, las mejoras de control y fidelidad visual de muchos de los títulos más actuales han enriquecido cada vez más nuestra experiencia a los mandos, enriqueciendo cada vez más nuestra experiencia de juego rozando los límites entre la realidad y la simulación.
Gracias a los simuladores modernos podemos aprender mucho sobre una profesión ya sea en Farming Simulator u otros simuladores como Demolish & Build Classic, una obra en la que jugamos como propietarios de una empresa de destrucción y nuestros empleados pueden usar varias herramientas, como martillos, pero también pueden usar máquinas más pequeñas o más grandes, como excavadoras, excavadoras, grúas o un robot controlado a distancia que puede funcionar en las condiciones más duras; lugares inaccesibles y peligrosos.
Demoliendo, que es gerundio
Las demoliciones y derribos de edificaciones constituyen actualmente un volumen de obra importante dentro del sector de la construcción. Las necesidades de la sociedad exigen altos volúmenes de obra y toda obra tiene una vida limitada, ya sea porque deja de cumplir sus funciones o porque el avance humano o tecnológico requiere construcciones con características diferentes.
El final de toda construcción es el derribo total o parcial, que siempre requiere una demolición que asegure reducir el impacto ambiental del proceso, y tomando en cuenta que el tiempo de vida promedio de un edificio oscila entre los 50 y los 100 años, el avance de la sociedad exige conocer técnicas de demolición y derribo que optimicen los recursos humanos, económicos y técnicos, y que permitan disminuir los riesgos de accidentes y el impacto medioambiental.
Demolish & Build Classic se ampara en esta máxima, ofreciéndonos un desarrollo en primera persona en el que debemos determinar el estado de ruina de los edificios, los cimientos y depósitos, el tipo y estado de la estructura, y los componentes de la estructura en sí.
De la misma manera, el juego de marras nos enseña que la demolición es un trabajo que requiere el empleo de equipos específicos y, sobre todo, que entraña riesgos importantes si no se ejecuta correctamente. Generalmente, todas las labores de demolición manual se compaginan con tareas simultáneas de desmontaje y separación de materiales, pudiendo emplearse para ello (si el estado y las características de la construcción lo permiten) maquinaria de pequeño peso para tareas de transporte y evacuación de materiales.
Antes de la creación viene la destrucción
Al final, todo lo que hacemos en Demolish & Build Classic es el derribo de construcciones y elementos constructivos hasta la completa eliminación, tanto de edificios como pavimentos, firmes, aceras, fábricas o cualquier otro que sea necesario.
Al menos, no existen dos demoliciones iguales ya que cada obra puede tener peculiaridades distintas que se deben de tener en cuenta en cada fase, estas peculiaridades nos marcarán las limitaciones y condicionantes y tener en cuenta tanto en los trabajos previos al inicio de la obra como durante y al finalizar el proceso de demolición.
Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital de Xbox Series X|S facilitada por Ultimate Games.