Pasar miedo viendo una película de terror no es lo mismo que experimentarlo a través de un videojuego. La interacción es la característica fundamental del llamado décimo arte y, gracias a ella, la sensación de angustia, temor y tensión se multiplican. Videojuegos de terror los hay desde hace más de treinta años, títulos como Alone in the Dark o Resident Evil sentaron las bases de un género que no ha dejado de evolucionar y provocar cada vez más sobresaltos.
Durante las últimas décadas, los juegos de terror se han diversificado. Sigue existiendo la aproximación más clásica, la que conjuga la sugestión audiovisual (monstruos, fantasmas, casas encantadas…) con la jugable (escasez de recursos, movimientos ortopédicos), pero también hay propuestas orientadas a la acción o donde el terror se basa completamente en lo que vemos en pantalla y escuchamos en los auriculares.
Corre, por lo que más quieras
Euphoric Brothers vendió Garten of Banban 6 como una especie de survival horror y, para ser sinceros, cumple bastante bien en lo que a la ambientación se refiere: Contrastes de escenarios claros y oscuros, sonidos que nos mantienen en tensión y una continua sensación de incertidumbre. Pero, a pesar de todo esto, el juego no consigue explotar todo su potencial, ya que no llegan a ser aventuras de terror por completo y no consigue hacer que avances con miedo debido a los obstáculos demasiado simples a los que nos enfrentamos
Y es que, Garten of Banban 6, no está hecho para que nuestro protagonista lo pase demasiado mal. La dificultad es simple y los puzles que se nos presentan para ser resueltos y así poder avanzar pecan de ser demasiado sencillos. Con unas cuantas mecánicas más, este podría haber sido un juego muy prometedor del género del survival horror.
Dicho de otra manera. El juego es perfectamente consciente del decorado que ha recortado y pintado para nuestros ojos, y se le nota concentrado en accionar cada palanca y mover cada foco en perfecta coordinación para que la experiencia sea fluida, con un ritmo que no decae y un mundo sin puntos ciegos en el que además se han preocupado mucho de no lanzarnos sustos fáciles a la cara y que sea la atmósfera macabra la que plante la semilla del pánico en nuestro cerebro. Quizá su problema esté justo ahí, en lo que mejor hace: parece tan pendiente de los artificios y las sombras chinescas que se olvida un poco del resto.
La prueba es que los puzles son los mismos de hace una década —reúne las piezas, pon un contrapeso, mueve esa silla— y la mecánica es mucho más difusa de lo que parece en un principio. Evitar a los monstruos a base de moverse y esconderse es solo una exigencia ocasional, y a medida que uno se aprende la gestualidad propia del juego se da cuenta de que la mayoría de veces ese tono amenazador, ese sonido de un cuerpo arrastrándose y ese «ay, ay, ay» no son más que los petardos de un niño en el patio de luces.
¿Secretos en una guardería? Nadie podría haberlo imaginado.
Hay a quién no le hace nada de gracia que lo asusten y procura evitar el jugar juegos de miedo. Pero ver como asustan a otro sí que la tiene, y mucha. Ideal para llamar a unos amigos, apagar las luces y ponerlo muy alto, ver jugar a Garten of Banban 6 crea esa sensación, esa barrera defensiva al no estar jugando nosotros y viendo a otro, ya sea en directo físicamente, en directo a través de Twitch, o en un video subido de Youtube, que nos hace estar un poco más a salvo, ya que el que se llevará el susto directo es el que juega.
Dicho de otra manera, el juego que nos ocupa es de esos títulos ideales para contemplarlos como espectador si los juegos de miedo no son lo nuestro pero aún así tenemos la curiosidad por verlo pero queremos una distancia de seguridad.
Al final, lo más directo que se puede decir es que es un indie muy sencillo a nivel de aprender a jugar, siendo accesible desde un inicio. Es ideal para un streaming, para una partida grabada, para jugar o para contemplar si no se quiere participar directamente en su experiencia. Es uno de los títulos actuales que cumplen muchos de los postulados no escritos para convertirse en un rápido éxito de masas en un Internet que siempre quiere cosas nuevas. ¿Sustos de consumo rápido, explotación pura del género que va a lo directo y se deja de tonterías innecesarias? Pues sí, pero quizá eso no sea suficiente si buscas un juego de terror al uso.
Este análisis ha sido realizado gracias a una clave digital de Xbox facilitada por Feardemic.