Las historias protagonizadas por un grupo de personajes variopintos siempre ofrece una amalgama de perspectivas y aumenta la oportunidad de empatizar con algún enfoque en concreto. El amante del riesgo, la mente pensante o el líder que proporciona equilibrio son algunos de los patrones que tienden a repetirse, fruto de unos roles que hacen posible el avance de la trama al mismo tiempo que crean dinámicas dentro del equipo.
Si, además, matizamos que la profesión de los susodichos consiste en salvar a la gente, no son pocos los ejemplos de superhéroes que hacen piña por un bien mayor. Al final, algo que nos atrae enormemente de este tipo de obras es la versatilidad del grupo, la gran cantidad de poderes y elevar al máximo exponente una fuerza que consigue hacernos creer que todo es posible.
En este caso, Javs Game Studios se pone a los mandos de Basureroes: Invasion para conferirnos una serie de poderes y acercarnos a la emoción de aportar nuestro granito de arena –o, más bien, nuestra montaña– y contribuir en la búsqueda de una sociedad más justa y libre de villanos.
Al servicio de la ciudadanía (y de la limpieza)
Con el afán de poner fin a una amenaza de nivel espacial, controlamos a un grupo de héroes que se vuelven a reunir para trabajar codo con codo. Donde una vez intentó reinar el Dr. Diógenes –con toda la “limpieza” que ello comporta–, ahora al plantel se suman unos monarcas alienígenas dispuestos a conquistar la Tierra y acabar con todo ser viviente. Así, con la excusa de que hace buena temperatura y se come bien, eligen destino para algo más que unas meras vacaciones.
Por eso, para estar a la altura de las circunstancias, Basureroes: Invasion nos tiende la mano de Basurero enmascarado, Vengador del cubo, Residuo orgánico y Recicladora nocturna para intentar restablecer el orden en Nueva Genesia. Sin embargo, lo que empieza con una elección entre cuatro personajes, prácticamente se acaba duplicando para, además de poder avanzar, brindar un sinfín de posibilidades a los niveles. Así pues, sus peculiaridades residen en el tipo de combate en el que se especializan –cuerpo a cuerpo o a distancia– y en una especie de habilidad que va desde la férrea defensa o el planeo hasta la utilización de un bastón multiusos.
Apto para dosis comedidas de diversión, el juego que nos ocupa tiene una estructura por niveles protagonizados por una vertiente plataformera que se va volviendo más desafiante gradualmente. Ahora bien, Basureroes: Invasion se adapta a cada persona a los mandos gracias a una serie de opciones personalizables. Por una parte, cuenta con cuatro modos de dificultad, desde el fácil hasta el héroe, siendo este último únicamente desbloqueable tras una primera partida. Por otra parte, un modo moderno u otro clásico, cuya diferencia reside en tener a nuestro alcance vidas infinitas o no.
Aunque lejos de quedarse en una contienda de yo solo contra el mundo, los puños y las armas quedan en un segundo plano en determinados puntos, a causa de unas fases centradas en la persecución de algún enemigo más poderoso o en la conducción de motos y naves. Sobre todo estas últimas suponen un respiro y un soplo de aire fresco, a pesar de que no están exentas de peligros.
La acción en plena gestión de residuos
Como Basureroes: Invasion va de salvar el mundo, no podía faltar la parte explícita de salvar a la gente. Por ello, en cada nivel hay hasta cinco habitantes en apuros que tranquilizar y un perrito que acompañar hasta el final del nivel –y que, por supuesto, también podemos acariciar en cualquier momento–. Hallándose muchos de ellos en lugares difícilmente alcanzables, Javs Game Studios nos ofrece, en este sentido, una suerte de rejugabilidad obligada, ya que el acceso a los héroes sucede de forma escalonada, no pudiendo rescatar a todas las personas en una única visita a los escenarios.
Con un apartado visual la mar de colorido, Basureroes: Invasion es disfrutable de muchas maneras. Básicamente, porque también podemos exprimir nuestra velocidad a partir de un registro de tiempo y abrazar el speedrun que tantos adeptos tiene. Asimismo, aunque más independientemente, existe la posibilidad de empezar un partida exclusivamente de boss rush para poner a prueba nuestra habilidad.
Pero si lo vuestro es jugar en compañía, Javs Game Studios también se encarga de conectar un famoso player 2 en la partida. De hecho, va más allá, permitiendo jugar a la vez hasta cuatro personas en un modo cooperativo que añade una capa más a la jugabilidad y aboca a una sincronización más que necesaria. En esencia, aporta un ejemplo más de que la unión hace la fuerza.
Y para forjar ese vínculo, Basureroes: Invasion se envuelve en una generosa dosis de humor. Nos hace reír en más de una ocasión, principalmente a raíz de una determinación casi extrema por parte de algunos personajes y de algunas situaciones que rozan lo absurdo. No obstante, también hay hueco para un ligero drama familiar y, por qué no decirlo, unas animaciones de alienígenas caídos que nos hacen plantearnos si la ruta genocida es la mejor opción.
¿Es que eso no puede hacerlo otro?
Aunque en ningún momento pretende sensibilizar sobre el desecho de residuos, Basureroes: Invasion se las ingenia para convertirse en un videojuego de plataformas entretenido y vistoso. Y le bastan alrededor de 5-6 horas para una primera pasada en la historia, aumentando alguna cifra más si decidimos completar el salvamento y darle un tiento a todos los modos de los que hace gala.
En definitiva, sus modos personalizables, la ligera variación de las plataformas en momentos puntuales y un amplio abanico de personajes con habilidades únicas logran que construyamos una experiencia a nuestra medida. Algo que culmina una modulación más que satisfactoria de los modos de dificultad, consiguiendo crear un verdadero desafío en las mayores dificultades, pero también siendo capaz de procurar diversión en las versiones más sencillas.
Este análisis ha sido realizado gracias a una clave digital de PC facilitada por JanduSoft.