Es muy probable que muchos de nosotros, en nuestro inicial descubrimiento y posterior amor por los videojuegos, hayamos experimentado un periodo en el que estábamos convencidos a dedicarnos a este medio, antes incluso de darnos cuenta de lo difícil que es comprender los diferentes lenguajes de programación que se utilizan en el desarrollo de dichas obras. Pero el sueño estaba ahí, y, aunque pasamos por ese momento de inflexión en el que al final pusimos nuestras miras en otras cosas, muchos saboreamos una primera muestra de esta actividad con RPG Maker.
Una plataforma que ayudaba a plasmar en pantalla nuestras primeras aventuras imaginarias y que nos enseñaba pequeños retazos de lo que sería el verdadero mundo de la programación por medio de historias fantásticas. Dicho de otra manera, es una aplicación sencilla que ha dado alas a un sinfín de ideas sin necesidad de escribir código, pues bastaba tan solo un paisaje vacío para rellenarlo con todo tipo de cosas, desde casas y árboles, hasta castillos y escuelas a golpe de unos pocos clics, lo que nos lleva hasta este Corpse Party, un buen ejemplo que confirma este estamento, que no te limita de ninguna manera en cuanto a ser creativo.
En la superstición y el oscurantismo
Un estamento ambientado en la Academia Kisaragi, cuya historia gira en torno a un grupo de estudiantes que se reúnen después de clase para contar historias de terror y así despedir a una de sus compañeras que se cambia de instituto. Después, deciden realizar un inocente ritual, Sachiko Ever After, con la intención de que el grupo mantenga su amistad para siempre. Sin embargo, algo sale mal, y un repentino terremoto provoca que el terror se apodere de ellos.
Asustados, al reincorporarse se encuentran con que la escuela se ha transformado por completo, pues a su alrededor todo está en ruinas y abandonado, y lo que es peor, han quedado separados los unos de los otros. Sin entender lo que ha ocurrido, estos intentan emprender una búsqueda para volver a estar juntos, aún cuando desconocen los horrores que acechan en cada esquina.
Aunque Corpse Party se juega como un JRPG tradicional al uso, este es, en esencia, una novela visual con elementos de terror. Si bien, su clásica disposición en 2D a la hora de explorar lo convierte en algo más que eso, pues no vamos a pasar gran parte de la aventura viendo una sucesión de escenas con diálogos interminables. Después de todo, nuestro objetivo pasa por salir con vida en una aventura de estructura capitular, y eso significa que tenemos que recorrer todas y cada una de las estancias de la Academia, encontrando los objetos necesarios que nos lleven hasta el siguiente escenario. Eso y plantar cara a los horrores que nos aguardan en las sombras, en tanto que una mala decisión puede traer consigo consecuencias desastrosas.
El amor “consciente” y la madurez emocional
En la adolescencia, la relación con amigos y amigas puede ser mucho más significativa que con la propia familia. Los iguales son con los que pasan más tiempo y con quien comparten más cosas en común, así como actividades a diario, desde ir al colegio hasta actividades deportivas. Es una época en la que los y las adolescentes se van desvinculando de sus familias y las relaciones con sus compañeros y compañeras ganan en importancia, intensidad y estabilidad. Por tanto, el grupo de iguales pasa a ser el grupo preferente de socialización.
A este respecto, Corpse Party juega con las relaciones interpersonales y cómo estas se ven truncadas. Y no porque estos no saben trabajar en equipo, no, sino por la incapacidad de superar situaciones difíciles. A veces, por culpa, vergüenza o miedo, no respondemos ante determinadas situaciones como realmente querríamos y el juego que nos ocupa lleva esto hasta el extremo. De la misma manera, experimenta con el desconcierto y dificultad para tomar iniciativas cuando la normalidad abandona la centralidad de las aulas y habilita espacios de hegemonía compartidos.
En otras palabras, Corpse Party no es solamente una grata experiencia en todo lo referente al terror que tanto profesa, y que tan bien consigue con las paredes llenas de mugre, sangre e incluso cadáveres descompuestos. También lo es gracias a los vínculos que se generan entre los diferentes personajes, y que pueden ser interacciones espontáneas o vínculos permanentes, formando de esta forma un interesante rompecabezas que el jugador tiene que ir resolviendo para desentrañar todos los misterios que hay en la academia.
Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital de PlayStation 4 facilitada por Marvelous Europe.