Las tornas han cambiado: este verano los estadounidenses prefieren los programas de entretenimiento a las series de televisión. Como viene ocurriendo desde que el mundo es mundo, la llegada del período estival trae consigo la modificación de las parrillas televisivas de las distintas cadenas, que suelen apostar por una programación más barata y, a ser posible, que no tengan que producir. A fin de cuentas, la mayoría de la gente suele escaparse unos días por estas fechas para aprovechar el buen clima, desconectar y relajarse, a ser posible sobre una tumbona, en bañador y con vistas al mar.
El notorio descenso del consumo televisivo provoca que las cadenas no se atrevan a hacer peligrar sus formatos más populares, siendo conscientes de que en otras temporadas del año pueden congregar a un mayor número de telespectadores. No obstante, las cadenas de radiodifusión norteamericanas de la talla de NBC o ABC están ofreciendo grandes formatos, algo que necesariamente ha de salirles más rentable que la seriéfila alternativa. Formatos que siguen la vida en el vasto Mar de Bering.
Porque de eso trata ‘Deadliest Catch’, una propuesta que lleva más de 15 años en antena. Se emite en el Discovery Channel estadounidense y es un reality show producido por Original Productions. Además, de los que definen el verdadero concepto de reality show que demuestra que hay mil formas de desarrollar y mostrar las realidades. La profesionalidad de los pescadores y trabajadores del barco, su día a día, noche a noche y las relaciones de trabajo con el capitán escriben por sí solas el guion del programa.
Una máxima en el videojuego que protagoniza estas líneas: Deadliest Catch: The Game, una adaptación de la serie homónima y una suerte de simulador de pesca.
¿Y tú, qué haces por los mares?
El juego desarrollado por la gente de 4Fishing tiene un objetivo: Seguir la pesca del cangrejo real durante su temporada, en el insólito y misterioso Mar de Bering, uno de los mares que más intriga me produce personalmente por la cantidad de historias que se han sucedido ahí y que se hayan documentado en esos lugares. El Mar de Bering es hábitat natural de olas de 4, 5 e incluso 6 metros de altura. La meteorología no entiende de jornadas de trabajo y no existe el descanso, por lo que podemos sentir la verdadera peligrosidad del mar en uno de los trabajos más arriesgados del mundo.
Tanto es así que puede apreciarse a la perfección la tensión que supone trabajar en las cubiertas de los barcos pesqueros del cangrejo.
Por lo demás, la puesta en escena es muy similar a la de la serie de televisión, ofreciendo planos sumamente fidedignos y poniendo de manifiesto los peligros que se corre al estar en un barco, en los territorios de cangrejo del mar de Bering, en algunas de las aguas más frías y tormentosas del mundo, donde el más leve problema se vuelve complejo, requiriendo de un considerable ingenio para resolverlo, cuando el puerto más cercano esta, a menudo, a cientos de kilómetros.
Al final, Deadliest Catch: The Game es la historia de unos hombres luchando contra el mar, en busca de un alimento muy preciado, enfrentándose a la naturaleza, con capitanes intentando llevar las riendas de sus barcos en mitad de la hecatombe marítima. Y también, historias de padres que llevan seis semanas fuera de sus casas para mantener a sus familias.
Este análisis ha sido realizado gracias a una clave digital de Xbox Series X|S facilitada por Ultimate Games.
