Hay muchísimas actividades y deportes que se pueden llevar a cabo al aire libre. Desde cosas tan sencillas y comunes como el ciclismo hasta prácticas menos habituales como puede ser la pesca. Y aunque es una actividad con muchísimos años de antigüedad, esta sigue gozando de una vitalidad envidiable. Tanto es así que el mundo de los videojuegos de pesca está más extendido de lo que parece, puesto que no hemos parado de recibir nuevas iteraciones desde mediados de los años 90, pudiendo destacar simuladores como Fishing Planet o el también mítico Sega Bass Fishing.
De la misma manera, hace un par de años aproximadamente se unió un nuevo contendiente, Fishing Adventure, un juego desarrollado por la gente de MasterCode que nos permitía viajar por diferentes regiones del mundo con el fin de pescar también distintas especies de peces y así convertirnos en el mejor pescador del mundo. El resto ya os lo podéis imaginar, puesto que ahora hemos picado el anzuelo con su lanzamiento en la consola de Microsoft.
¡Dale caña!
Para muchos es sabido que la pesca es como la vida; requiere paciencia y perseverancia. Y a pesar de que no es una actividad que involucre mucho esfuerzo físico continuo, nos ofrece la oportunidad para dejar de pensar y escuchar a la naturaleza, brindando así la calma que no se puede lograr en otro lugar, ya que nos permite alejarnos por completo del ruido. Pero sobre todo, tened por seguro que no se trata de una disciplina que precise de unos pocos minutos.
En ese sentido, Fishing Adventure ofrece esta suerte de acercamiento mucho más amigable por medio de un desarrollo que hace una llamada a la tranquilidad. Porque en la vida real, por ejemplo, comienzas con toda la ilusión del mundo, tirando la caña aquí y allá, pero va pasando el tiempo y los peces no pican. Recorres el río arriba y abajo sin éxito. Y es entonces cuando empiezas a buscar una explicación; que si no hay peces es porque no tenemos el cebo adecuado o bien que no es el mejor momento para darle a la caña. El caso es que poco a poco nos vamos inquietando y es ahí, donde debe aparecer la paciencia del pescador.
Por suerte, Fishing Adventure no precisa por entero de todos estos detalles. Al fin y al cabo, la captura de peces es sencilla, quizá demasiado, lo cual termina desembocando en un juego accesible, casi arcade, que puede ser relajante para el público adecuado. El problema estriba en que cada captura se reduce a dos opciones: vender la pieza al por mayor o bien devolver a su hábitat el codiciado ejemplar. Y las principales diferencias entre ambas acciones se limitan al dinero en efectivo y la cantidad de experiencia adicional.
Lo primero se puede invertir en equipamiento, desde nuevas cañas hasta señuelos, mientras que lo segundo nos permite acceder a nuevos países para seguir pescando, aunque eso también supone invertir una cantidad en metálico.
La paciencia y la dedicación hacen al buen pescador
Esto se traduce en que tenemos que invertir muchas horas de nuestra vida llevando en danza estos dos aspectos para que sintamos que estamos progresando. En otras palabras, tenemos que ampararnos sobre todo en el principio de repetición y continuidad, dado que de otra manera abandonaremos antes de completar la primera zona. Puede que haya muchos peces en el mar, pero jugar Fishing Adventure implica, como en la vida misma, mucho sufrimiento: el de la espera y el de la esperanza. Pide paciencia para que confiemos en nuestro triunfo.
Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital de Xbox One X facilitada por Ultimate Games.