fusion pro 3

Los videojuegos se han convertido en un hobby tan amplio, que las opciones que tenemos para consumirlo van desde precios de entrada sumamente accesibles, hasta lo más premium para quien quiere lo mejor de lo mejor. Justamente, empresas como Microsoft han tomado la postura de ofrecer la mayor cantidad de caminos para los consumidores. Para prueba, tenemos el caso del Xbox Series S y de Game Pass, combo que indudablemente, es el mejor trato costo-beneficio que alguien se pueda encontrar actualmente para entrar a la nueva generación de consolas.

Por supuesto, también tenemos el otro lado de la marca, uno que busca ser punta de lanza si hablamos de hardware, incluso en áreas que podríamos decir, sus productos estándar ya cumplen de muy buena forma. La línea de mandos FUSION PRO 3, de PowerA, justamente nos permite obtener todos los beneficios de una licencia Premium, poniendo de manifiesto un dispositivo que se encuentra un escalón por encima cuando toca disparar esa última bala o gestionar la estrategia de tu equipo sin tener que desplazar tus dedos de su posición.

A simple vista el mando de marras es prácticamente idéntico a uno de Xbox, pero como suele decirse, la diferencia está en los pequeños detalles, y los del FUSION PRO 3 son francamente buenos. Se siente extremadamente familiar, es el mando de Xbox al que ya te has acostumbrado, pero incluso siendo más pesado, es bastante cómodo e indiscutiblemente mejor al tacto.

Diseño y características del FUSION PRO 3

¿Qué hay dentro de la caja?

Cable USB-C: 3 m. Cable trenzado de 3 m para que pueda jugar desde su lugar favorito de la habitación

Carcasa protectora personalizada: guarde el mando, el cable y los controles intercambiables en un estuche con cremallera

Controles de pulgar intercambiables: incluye 2 controles cortos con tapas cóncavas y 2 controles altos con opciones cóncavas y convexas para que pueda personalizar su controlador para adaptarlo a tu estilo de juego.

Lo primero que te das cuenta al sacar de la caja el FUSION PRO 3 es que se trata de un producto premium. El mando viene en un estuche rígido donde además del propio mando, vienen incluidos todos los accesorios del mismo, de forma que podemos intercambiar las piezas del mando y tener bien guardados todos los elementos que no vayamos a usar.

Pero no solo en el embalaje se nota que estamos delante de un verdadero mando de Xbox llevado a otro nivel, si no que el propio tacto y los materiales tienen una mejor construcción. El mando tiene el peso ideal y por la parte trasera el agarre es mucho mejor que el del mando base al contar con una superficie más rugosa. La construcción está mucho más trabajada y lo notas sin que haya hecho falta ni conectar el mando a la consola.

Puesta a punto del FUSION PRO 3

Pensado para convertirse en la herramienta de trabajo preferida de jugadores profesionales o aspirantes a barrer oponentes en cualquier multijugador online, el mando FUSION PRO 3 cumple a la perfección con lo que promete: ofrecerte todo lo necesario para poder estar un escalón por encima cuando toca disparar esa última bala o gestionar la estrategia de tu equipo sin tener que desplazar tus dedos de su posición.

Y aunque todo esto está muy bien, claro, ¿qué diferencia realmente un mando normal de un mando como el que protagoniza estas líneas? El tacto de los botones, la posibilidad de cambiar los joysticks o el estilo de la cruceta es lo primero que salta a la vista.

Sobra decir que funciona a las mil maravillas y que, al menos a la hora de marcar la diferencia en un juego de disparos en primera persona, el hecho de tener el tiro a una pulsación de botón es tremendamente útil. Digamos que no va a convertir a un mal jugador en uno bueno, pero si uno de estos últimos se cruza con otro que tenga su misma habilidad, el que posea un mando FUSION PRO 3 en ese enfrentamiento tiene muchas papeletas para salir victorioso.

De la misma manera, la gran baza que juega el mando de marras más allá de los materiales y las ideas implementadas está en que puedes personalizar hasta la extenuación el mando, y no sólo configurando botones o eligiendo qué acciones comunes activarán las palancas traseras. El gran añadido de esta edición es poder convertir cualquier botón en una acción propia de la consola como abrir la lista de logros, tomar una captura o iniciar una retransmisión.

Una vez más es uno de esos casos en los que el usuario de a pie puede verlo como una nimiedad, pero el profesional que pasa gran parte del tiempo con un mando en las manos encontrará en ello un regalo para su productividad.

Un salto de calidad evidente

En resumidas cuentas, si hablamos desde el punto de vista puramente objetivo, cuantitativo, el mando es una mejora sustancial respecto al modelo base, y lo es en muchos frentes.

Los sticks analógicos completamente intercambiables, los botones traseros, los limitadores de los gatillos, las opciones de ajuste y perfiles… todo redunda en que sea un mando muy superior, y una propuesta muy completa, sino de las que más, a la hora de hablar de mandos Pro. Dicho de otra manera, es lo más parecido a una versión definitiva, y es el dispositivo que cubre mejor todo lo que ofrece Xbox Series S|X: mantiene las funciones del original y añade los extras que se piden a un contratipo profesional.

Esta reseña ha sido realizada gracias a un FUSION PRO 3 cedido por la compañía.

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