A lo largo de la historia del videojuego, hemos visto como multitud de obras se han diversificado en pos de crear nuevos géneros tan populares y extendidos como el metroidvania. Si bien, el sub género Musou es único en su especie, pues la práctica totalidad de los títulos han sido desarrollados por una misma compañía: Omega Force, siendo Dynasty Warriors uno de los buques insignia. Una saga que, irónicamente, comenzó siendo un juego de lucha al más puro estilo Soul Calibur, pero esa es una historia que merece ser contada en otra ocasión.
Al tratarse de un género bastante singular, la definición de lo que son los Musou depende en cierta medida de la interpretación que llevemos a cabo. Sea como fuere, si tratas de explicar a alguien lo que es, lo mejor que puede decirse es que se suelen caracterizar por sus niveles a gran escala llenos de enemigos, una lista considerable de personajes jugables y una experiencia claramente inspirada en el fenómeno de la acción más desenfrenada. Lo que queda es una experiencia en la que aparecemos en una sección del mapa desde la que abrirnos paso con el fin de capturar más y más bases enemigas.
Son muchas las propuestas que han tomado para sí esta máxima, pero todavía más las sagas que han alcanzado nuevos horizontes. De hecho, esa es la razón de ser de títulos como el que protagonizan estas líneas, Touken Ranbu Warriors, una experiencia que sirve como contrapartida al padre de los Musou, a este respecto, cambiando el relato chino de los Tres Reinos por un escenario ambientado en el periodo Sengoku.
El pasado y el futuro están en nuestras manos
Desde siempre, la humanidad ha soñado con poder cambiar el pasado, mientras que otros desean conocer qué ocurrirá en su futuro. Sin embargo, la invención de una máquina que pueda lograr esto es considerada, hasta el momento, una fantasía. Pero ¿qué ocurriría si tuviéramos esta habilidad de poder cambiar nuestro pasado? El efecto mariposa es algo tan insignificante y en él vemos cómo retrasarse unos cinco minutos para nuestro trabajo puede librarnos de un accidente o causar, cambiando por completo nuestra vida. De poder viajar en el tiempo al pasado, los efectos serían impredecibles.
Un solo número agregado al inicio de una ecuación da un resultado completamente distinto de la misma, no importando cuán compleja sea ésta. Si logramos viajar al pasado, el solo hecho de hablar con una persona o tocar algo cambiaría drásticamente el futuro para bien o para mal y lo que es más impactante de este tema es que si el viaje en el tiempo es posible, ya está ocurriendo en algún momento de nuestra historia.
Es un tema muy interesante pero a la vez preocupante, pues esta tecnología en manos equivocadas podría causar mucho daño. Imaginad por un momento que una de las potencias mundiales tuviera acceso a una máquina del tiempo y manipulara el pasado a su propio beneficio. O peor aún, ¿qué nos dice que esto ya no esté ocurriendo y que nuestra realidad no sea más que una realidad manipulada por otros humanos del futuro?
En este sentido, Touken Ranbu Warriors parte de un escenario en el que los diferentes protagonistas que componen la aventura tienen como misión salvaguardar la historia, la cual está siendo alterada por la History Retrograde Army, una organización que trata de manejar el tiempo a su antojo, viajando a través de él, usarlo, descubrirlo, jugar con él…
Acción masiva al estilo Musou
El período Sengoku, que significa literalmente “periodo de los estados combatientes”, es un periodo muy largo y caracterizado por las luchas para ver quien se hacía con el poder y el control del país. Por ende, Touken Ranbu Warriors sabe trasladar ese sentimiento de gran guerra desde un primer momento, por lo que la elección de un Musou es más que adecuada.
Sea como fuere, queda claro que Touken Ranbu Warriors no viene a impartir lecciones de historia, ni tampoco lo pretende. Sus credenciales son otras que están totalmente entregadas a la espada mientras cumplimos una serie de objetivos. Porque al final del día, estamos delante de un Musou y eso supone que vamos a estar batallando durante decenas de horas contra miles de oponentes. Si bien, no tendremos muchos problemas en plantarles cara, pues la agresividad de la que hacen gala los mismos brilla por su ausencia y, a la postre, se convierten en un acertado remedio terapéutico para combatir la rutina diaria en la vida real.
Al final, la obra que nos ocupa ofrece una experiencia de juego especialmente ágil, manifestando una propuesta para la determinación de la competitividad para aumentar la motivación en el fragor de la batalla.
Sentimiento invencible
Todo llega y todo pasa. Los años pasan sin que nos demos cuenta, pero con el género musou parece que el tiempo no pase a la misma velocidad, puesto que esta enésima iteración sigue ofreciendo las mismas batallas y espectacularidad de antaño. Ambientada a lo largo de varios periodos, la obra desarrollada por la gente de Koei Tecmo Games usa la sensación de poder como baza ganadora, una capacidad de control sin límites sobre el resto de mortales que reivindica un estatus de divinidad de forma instantánea. Así pues, si os resulta difícil desfogar vuestra ira, es posible que este Touken Ranbu Warriors sea un buen remedio terapéutico para superar un mal día.
Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital de Steam facilitada por Koei Tecmo Europe.