Alchemists

Lo primero que nos viene a la cabeza a muchos al leer o escuchar la palabra fantasma es la típica imagen de un ente portando una sábana blanca encima. O simplemente una sábana blanca capaz de moverse por sí sola de un lado a otro asustando a todo el mundo. O no, porque realmente resulta una imagen bastante cómica, por muy arraigada que esté entre nosotros.

En los videojuegos podríamos decir que los fantasmas (u otro tipo de entidades sobrenaturales) han estado presentes desde siempre adoptando una y mil formas, siendo uno de los casos más “recientes” Phasmophobia, una experiencia aterradora de investigación paranormal en la que los jugadores se convierten en parte de un equipo de cazafantasmas, y que pone su foco en el elemento cooperativo, compartiendo muchos paralelismos con la obra que protagoniza estas líneas. 

La emoción de descubrir lo desconocido, los escalofriantes encuentros con fuerzas espectrales y la adrenalina de recorrer lugares oscuros y encantados: este es el estimulante mundo de Alchemists, un juego de terror cooperativo que se puede jugar con al menos 1 y un máximo de 4 jugadores, y cuyo objetivo es expulsar al espíritu maligno de los lugares malditos completando el ritual de los 4 elementos.

El ejército de las tinieblas

Sobre el papel, la propuesta jugable es terriblemente simple.

El modo en el que el espíritu maligno se manifiesta en la partida y la truculenta ambientación de cada una de las cuatro localizaciones le dan el toque creíble a la experiencia. La clave del buen hacer de Alchemists no reside únicamente en cómo la desarrolladora consigue que cada jugador se sumerja en su propia experiencia, sino en su manera de generar la identidad de cada espíritu, de modo que por muchas partidas que llevemos por delante no sabemos cómo va a reaccionar o a qué nos estamos enfrentando realmente.

Dicho de otro modo, la verdadera esencia de Alchemists reside en tres pilares:

Se trata de un proceso de investigación en equipo que nos expone completamente a lo desconocido. Por otro lado, al tratarse de un juego cooperativo, la manera de adentrarnos como grupo y a nivel individual en la atmósfera de cada escenario y el modo en el que cada jugador reacciona a las manifestaciones, las sutiles y las más explícitas, acaba asentando el tono de cada investigación. En otras palabras, cada decisión influye directamente en los hechos acaecidos durante cada partida.

Finalmente, existe un elemento esencial en Alchemists: el tiempo. Mientras más tardemos en reunir los cuatro elementos o entender qué está pasando, estaremos expuestos a más manifestaciones y actividad paranormal.

Dicho lo cual, Alchemists se encuentra en fase de Early Access, y eso se nota. No solo porque es poco intuitivo, especialmente de cara a los recién llegados, sino porque a veces su control es demasiado tosco y, salvo que vayas guiado por alguien con más experiencia, para averiguar cómo sacarle el partido a cada herramienta necesitarás pasar por una fase de ensayo, acierto y error.

Raining blood

Aun con todo, la gente de WASD Game Studio ha creado un título que satisface la curiosidad de los jugadores hacia lo sobrenatural a la vez que les hace saltar de sus asientos de risa y susto por igual. 

Alchemists no es la experiencia de terror definitiva, pese a que es capaz de despertar verdaderos sobresaltos. Pero logra invitarnos a vivir y experimentar con los sucesos paranormales, y con nota. Uno de esos juegos que se disfrutan entre amigos, pero que también resultan todo un espectáculo siendo simplemente un espectador más.

Estas impresiones han sido realizadas gracias a una clave digital de PC facilitada por PressEngine.

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